La convivencia es aprender a vivir juntos, respetándonos y cuidándonos unos a otros. Cada persona es diferente: pensamos distinto, sentimos de manera diferente y tenemos gustos propios. Precisamente por eso, convivir es una oportunidad para aprender, compartir y crecer como grupo.
Cuando convivimos bien, escuchamos, ayudamos, aceptamos las normas y entendemos que todos somos importantes. No se trata de ser iguales, sino de respetar las diferencias y valorar lo que cada uno aporta. Así, el grupo se hace más fuerte y el ambiente es más agradable para todos.
En la convivencia compartimos momentos, actividades y emociones. A veces hay que ponerse de acuerdo, otras veces ceder, pero siempre con respeto y compañerismo. Disfrutamos de todas estas actividades gracias al proyecto de coeducación del centro, financiado por el Pacto de Estado, que promueve la igualdad, el respeto y una educación basada en valores.
Y al final, cuando nos juntamos, reímos y participamos, nos damos cuenta de algo muy bonito: todos somos distintos, pero todos jugamos juntos… y al final, todos jugamos a juegos de mesa.
